lunes, 16 de junio de 2014

DISERTACIÓN NºI

Presente en medio del círculo. En la dirección del viento estoy.
Siento su olor degradando el interior... metal, plástico y aerosol, con mil sonidos en colisión.
Bienvenidos a la función el gran teatro sin guion. Donde el director se funde contigo, conmigo y con el propio camino al que muchos designan: Destino.

¿Dónde está el telón?

          Se encuentra en los ojos con los que crees que ves. Pues no se ve con los ojos sino con la creencia que se forjó con el paso del tiempo en tu interior. Que moldea la interpretación de si está bien o de si no. Cual catalejo manchado y foco mal engranado/ajustado. Prejuicioso y alterado con las manchas del pasado.Tan dictador, tan viciado que creer tener la verdad en su mano. Que castiga y fustiga al que no entra en su guarida. Fortaleza de maleza intentando proteger su cabeza. Más en verdad es solo la herida que castiga todo lo que no asimila como suyo, tras un muro tan profundo y hondo como oscuro. Es el reflejo de tristeza de miedos y de flaquezas, de soledades bajo la mesa. Se cree fuerte con su látigo torturando, bocinando, berreando y calumniando, pero solo se protege de lo inerte que se siente, de la envidia que le asfixia al ver brillar la otra colina. Es solo un ego sin control que desconoce el YO, la metafísica del corazón.

      La paz secuestrada por el dinero, por las mentiras, y distorsión de toda la educación. De los maestros en colegios y universidades de cementerios. Intoxicados por el hedor del dolor de unas vidas carentes de ilusión, que significan el Vacío de un mundo que ya ha caído en el olvido. Olvido de lo que fue de lo que ES y de lo que será. De olvidar que no es lo mismo "enamorado" que " el amar". Como grandes luces y señales, de espejismos en desiertos donde el agua se secó. De promesas marchitas antes del primer sonido expresado. Corrompidos de enfermedad mental,  psicológica y espiritual que termina somatizándose en sus cuerpos. Lo puedes sentir al despertar, al captar como si el propio sueño fuera más real que esta aparente dualidad.




Entonces, ¿dónde está la paz?


      Secuestrada por la ignorancia, por no entender lo que el entender es. Por leer y leer y nada encontrar, ya que en un libro jamás estará. La paz se cultiva en tu interior, en cada ocasión. No se compra, no se da, no se venderá jamás. Si la pides no hallarás, si la rezas no estará. Si hoy supieras la verdad, sería como un gran despertar, ya que volverías a experimentar: YO SOY UNO SIEMPRE EN LA PAZ.
Y lo sabías... ¿recuerdas ya? que el saber en ti anida. Ni mucha tele, ni estudiar, ni gritándote entera la sociedad, podrá decirte lo que es verdad, ni lo que es falso en tu mirar.

Cuando hieres a un hermano. ¿Dónde está tu paz? Esa que aclamas fuera...

    La exiges fuera, dentro no está. Y te peleas porque no está. Te enfadas siempre porque no está. Grita si quieres, pero así no volverá. Ni el Papa, ni el presidente, ni las leyes te la darán. Y mucho menos armas y guerras de soledad, de odio, de muerte, y de orfandad.

¿Crees que así es posible?... Lo siento pero NO. ¿De verdad no ves la lógica?

     La violencia es hija del odio en tu pecho y malestar....
Aunque domines el mundo tras acribillar a todos tus enemigos con infinita furia al caminar, sus cadáveres serán tu tumba. Tu muerte en vida. Tu no descansar. De voces, de susurros, de lamentos en el silencio. Y serán tuyos y suyos. Porque la verdad es que somos UNO con lo que decidimos crear. UNO con TODO.
Porque TODO es UNO. Si eliges la violencia, violencia serás. Si eliges la guerra, luchando morirás.
Cuando eliges creas, si creas proyectas una realidad devuelta. Ya que no hay diferencia entre lo que es y será, si no cambias el ritmo del timón. Como dice el dicho y como nos enseña la tierra: "lo que siembras recogerás."

¿Entonces culpamos al otro?

    ¡No, no y no! ¡Responsables tú y yo! Recuérdalo y deja de culpar y de quejarte. Recoge del suelo tu moral y tu ambición. Antes de rogar y culpar al otro, al distinto en ti en cualquier condición.
Somos el veneno. Somos la solución. Tú y yo, yo y tú, todos juntos. Porque nunca jamás estuvimos solos ni separados. Conectados hasta en lo más profundo del impacto más liviano. Sumamos el mundo. Somos quien mandamos. Ni uno, ni mil. Somos todos. Nuestros pensamientos y creencias construyen lo que ves. Construyen lo que sientes. Es el cemento del ataúd que ves cada vez que se apaga el Sol en tu morada, en la noche de tu alma. Cuando la oscuridad reina alto lo puedes ver, sentir dentro de ti, entonces el delirio, la locura y el desdén. Del culto al vacío, de hipocresía y de timos.

El infierno no existe más allá que en tu mente.
El infierno no es ni más ni menos que un estado de sufrimiento interior proyectado por una mente en conflicto interior... Que no halla la paz, que no puede descansar
    Siente como se oculta hoy la infancia tras la vieja piel, de arrugas y cortinas de mentiras y toxinas que liberas cada día. No en forma de humo, de líquido o de gas. Llámalo alquitrán que se pegó a tu enfoque vital. Distorsionando cualquier verdad. A cargo de un falso YO mental. Que todo lo plantea mal. Que está en contra de la naturaleza y de la armonía. Ética o moral. Siempre encuentra brechas... Reflejo de su identidad.
Y todo son reflejos y posturas. Máscaras de autotortura. Más por dentro vacíos de talento. Inteligentes y eruditos pero no sabios
No son auténticos, no son soldados
Son cadáveres en vida sin luz y sin sueños... Vacíos por vicios y con dinero
De un lado a otro gastando su tiempo. Condenados a la infelicidad por ellos mismos...
Condenan y odian a los demás. Y roban, y mienten , y matan, y pervierten la verdad
Culpando a otros de todo su mal, en vez de ser humildes y probar a rectificar.
Muy pocos lo hacen ya. Es un valor de valentía integral.

YO SOY EL QUE SOY
Como un dios creo mi realidad...
Mas el poder más grande saber amar, saber perdonar... porque ¿Quién soy yo para poder juzgar? Si ayer me equivoqué y mañana también, no seré hipócrita.


LA INTELIGENCIA COMPASIVA
 El único camino para despertar del sueño de las separación. Libérate del miedo, cambia de canal, calibra el tono adecuado de la "frecuencia".
Recoge lo que siembres. Siembra bien que piensas. Piensa bien lo que siembres. Descubre el significado de tus ciclos psicoafectivos, de tus sentimientos más profundos. Ellos te guiarán y te dirán si lo haces bien o mal.
Aprende a escuchar lo que sientes ahí dentro. Cada vez más de cerca. Atiende con toda tu voluntad lo que te grita toda tu entidad y que has olvidado caso hacer ya.


Tapa tus oídos del exterior y escucha el idioma del silencio. Aprende los secretos del saber pensar, del saber amar. Para identificarte con la Inmensidad que hay dentro y hay fuera. Sin brechas ni grietas.

Héctor Montesdeoca

domingo, 15 de junio de 2014

Novedades

En este apartado, os iremos informando de las novedades que vayan surgiendo, así como de los conciertos o datos de interés.